Los recientes crímenes contra figuras políticas evidencian el avance del crimen organizado en los procesos electorales y su impacto en la democracia mexicana.
México enfrenta una preocupante ola de violencia política. En solo 36 horas, al menos cinco políticos fueron asesinados en distintos puntos del país, lo que ha generado alarma entre partidos, autoridades y organizaciones civiles. Los crímenes ocurrieron en Jalisco, Veracruz y Oaxaca, justo en medio de un proceso electoral crucial para la nación.
Asesinato en Jalisco en plena zona comercial
El lunes 13 de mayo, el exdiputado priista Luis Armando Córdova Díaz fue asesinado a balazos mientras se encontraba en una cafetería de una plaza comercial en Zapopan. Córdova era actualmente secretario de Alianzas Políticas y Agenda Ciudadana del PRI en Jalisco. Según la Fiscalía estatal, los agresores huyeron en motocicleta y fueron captados por cámaras de vigilancia.
Alejandro Moreno, presidente nacional del PRI, calificó el crimen como un reflejo del grado de violencia e impunidad que se vive en el país.
Veracruz: tres políticos ejecutados en menos de 24 horas
La violencia también sacudió Veracruz. La madrugada del 13 de mayo, Esteban Alfonseca Salazar, exalcalde, y Edmundo Martínez Pérez, exregidor de Actopan, fueron asesinados tras asistir a un mitin en apoyo a un candidato de Morena. El ataque ocurrió en la carretera Santa Rosa-Actopan.
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Horas antes, la noche del 12 de mayo, Yesenia Lara Gutiérrez, candidata de Morena a la presidencia municipal de Texistepec, fue asesinada junto a otras cuatro personas luego de un mitin. El ataque dejó también tres personas heridas.
Oaxaca: otro crimen político impacta el proceso electoral
El PRD confirmó el asesinato de Gerardo Leobardo Santos López, exalcalde y excandidato al ayuntamiento de Santa María Ipalapa, ocurrido el 11 de mayo. El crimen fue calificado por el partido como un atentado directo contra la democracia.
Crimen organizado, un actor político más
Expertos en seguridad advierten que esta violencia está desdibujando los límites entre política y criminalidad. Lisa Sánchez, directora de México Unido Contra la Delincuencia, alertó que los grupos criminales están comenzando a influir en los procesos electorales: “Los criminales influyen en las elecciones poniendo o quitando candidatos. Los intimidan, sobornan o asesinan”.
Según la especialista, esto representa una forma de “gobernanza criminal” que afecta la instalación de casillas, la observación electoral y el ejercicio del voto libre.
Reforma urgente y protección real
Armando Vargas, de México Evalúa, señaló que los ataques provocan una disminución en el número de candidatos y debilitan la confianza ciudadana. Propuso actualizar los protocolos de protección con nuevos criterios y, a largo plazo, reformar las estructuras municipales para fortalecer a las policías locales e impedir la infiltración del crimen organizado.
Datos que preocupan
Según Integralia, en el primer trimestre del año se registraron 50 asesinatos de actores políticos en México. Guerrero y Morelos lideran la lista con siete casos cada uno. La alianza Morena–Partido Verde–PT es la que más víctimas acumula.
