La cifra de víctimas por las intensas lluvias registradas en los últimos días aumentó a 47 personas fallecidas, 38 no localizadas y 259 comunidades incomunicadas en cinco estados del país. El Gobierno de México, que informó sobre el lamentable saldo, destacó que las labores de rescate y apoyo continúan, con la habilitación de 146 refugios temporales para atender a 5,448 personas.
El saldo trágico que sigue en aumento
De acuerdo con los últimos reportes, Veracruz es el estado con el mayor número de fallecidos, con 18 víctimas mortales, seis no localizadas y miles de damnificados. Le siguen Puebla, con 12 muertes y 15 personas desaparecidas, e Hidalgo, que contabiliza 16 fallecidos y 17 no localizados. Querétaro reporta un deceso, mientras que San Luis Potosí mantiene saldo blanco.
El apoyo federal y las labores de rescate
Para atender la emergencia, el gobierno federal desplegó a más de 6 mil efectivos de las fuerzas federales en labores de limpieza, desazolve y remoción de escombros. También se distribuyeron despensas y agua potable, se habilitaron plantas potabilizadoras y se instalaron cocinetas móviles en los 146 refugios temporales que se han habilitado en los estados afectados. El gobierno federal aseguró que se mantendrá el apoyo hasta lograr la recuperación total de las comunidades.
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El impacto de las lluvias y la infraestructura dañada
Las lluvias torrenciales han causado una serie de estragos, como el desbordamiento de ríos y arroyos, el derrumbe de cerros y la inundación de más de 6 mil viviendas. Las autoridades informaron que se han rehabilitado miles de hogares y reabierto tramos carreteros críticos para garantizar la conectividad en las zonas impactadas, en un esfuerzo por mitigar los efectos de las lluvias y garantizar la seguridad de la población.
La solidaridad con los damnificados
El Gobierno de México reiteró su solidaridad con las familias afectadas y aseguró que se mantendrán las labores de acompañamiento y apoyo integral. La tragedia que se vive en los cinco estados es un recordatorio de que México es un país vulnerable a los fenómenos naturales, pero que en momentos de crisis, la solidaridad y la organización de la sociedad civil son un pilar fundamental para ayudar a quienes más lo necesitan.
