Valeriana: La Ciudad Maya Perdida que Resurge en la Selva de Campeche

En las profundidades de la selva campechana, un hallazgo arqueológico ha revelado los vestigios de una ciudad maya desconocida hasta ahora. Gracias a la tecnología LiDAR (Light Detection and Ranging), investigadores lograron mapear más de 6,700 estructuras prehispánicas, entre ellas, una gran urbe bautizada como Valeriana, que podría haber albergado entre 30,000 y 50,000 habitantes en su época de esplendor.
Un hallazgo con siglos de historia
Este descubrimiento es resultado de una investigación publicada en la revista Antiquity, liderada por Luke Auld-Thomas y un equipo de arqueólogos de la Universidad de Tulane. Aunque los datos utilizados provienen de un proyecto de monitoreo ambiental realizado en 2013, su análisis detallado ha permitido revelar la compleja infraestructura de la ciudad y su conexión con otras áreas urbanas del periodo Clásico maya (250-900 d.C.).

Valeriana, ubicada cerca de Xpujil, cuenta con características típicas de un centro político de su época: templos piramidales, plazas, calzadas, un juego de pelota y un sofisticado sistema de gestión del agua. Sorprendentemente, esta metrópoli ha permanecido oculta a simple vista durante siglos, pese a estar a solo 15 minutos a pie de una carretera principal.
Un paisaje maya densamente poblado
El mapeo LiDAR reveló que la zona estudiada en Campeche tiene una densidad de 55.3 estructuras por kilómetro cuadrado, superando registros de áreas similares en Guatemala y Belice. Además, los investigadores encontraron evidencia de un sistema interconectado de asentamientos rurales y agrícolas, con terrazas y muros diseñados para la producción de alimentos, lo que indica un avanzado manejo del entorno.
Estos hallazgos desafían la idea de que los mayas vivían en aldeas aisladas y refuerzan la hipótesis de una civilización altamente conectada, con infraestructuras diseñadas para sostener grandes poblaciones.
Un descubrimiento inesperado, pero no accidental
Inicialmente, el estudio LiDAR se realizó con fines de conservación forestal y monitoreo de emisiones de carbono. Sin embargo, los arqueólogos aprovecharon estos datos para identificar estructuras que habrían sido imposibles de detectar a simple vista. Aunque esperaban encontrar rastros mayas, la magnitud del descubrimiento superó todas sus expectativas.

El futuro de la investigación
Si bien el LiDAR ha permitido revelar la extensión y complejidad de Valeriana, aún quedan muchos misterios por resolver. Para determinar con precisión la antigüedad de las estructuras y su función exacta, se requieren excavaciones en campo.
Este hallazgo confirma que el territorio de Campeche aún guarda innumerables secretos y que la tecnología seguirá siendo una aliada clave para redescubrir el pasado de la civilización maya.