La ceniza del volcán Popocatépetl, el cual ha mostrado una mayor actividad en los últimos días, alcanzó amplias zonas de la ciudad de Puebla y distintos municipios de la entidad.
Ciudadanos compartieron en redes sociales una intensa lluvia de ceniza ocurrida durante la madrugada de este sábado en distintas regiones, donde calles, avenidas, vehículos y plantas quedaron cubiertas por el material expulsado por el coloso.
El modelo de pronóstico alertó que la ceniza, podría dirigirse al noreste, hacia Angelópolis, en la zona metropolitana de Puebla, así como Atlixco y Valle de Serdán.
Los sistemas prevén también caída de ceniza en los estados de Morelos, Tlaxcala y Veracruz.
Las fumarolas y exhalaciones que ha presentado en Popocatépetl son consideradas, hasta ahora, como dentro de los parámetros del nivel Amarillo fase 2, del Semáforo de Alerta Volcánica.
Sin embargo, la Coordinación General de Protección Civil Estatal informó que integrantes de la Coordinación Interinstitucional del Programa Especial para Contingencias del Volcán Popocatépetl realizaron una reunión con las dependencias que conforman el grupo de refugios temporales.
Revisan padrón de refugios temporales
La dependencia detalló que se revisó la actualización del padrón de inmuebles a emplearse como refugios temporales, ante una contingencia volcánica.
Semáforo de Alerta Volcánica sigue en Amarillo fase 2
Desde que la actividad del volcán se hizo más intensa en 1994, se ha aplicado la fase 3 de contingencia solo en cinco ocasiones.
De acuerdo con el historial de monitoreo, esta fase se aplicó en 2003, 2012, 2013, 2019 y 2023.
En abril del 2003, las autoridades subieron el Semáforo de Alerta porque se registró una explosión moderada en el cráter, fragmentos incandescentes y un tremor armónico de amplitud moderadamente grande.
En abril del 2012 también se cambió a la misma fase porque registró explosiones con expulsión de material incandescente; la misma situación ocurrió en el año 2013 y 2019 con fragmentos incandescentes, flujos piroclásticos y ceniza que llegó hasta la Ciudad de México.
Y el año pasado ante la intensidad de la actividad volcánica, se realizó nuevamente la activación de refugios y la revisión de rutas de evacuación.