El 19 de diciembre llega la última luna en Sagitario del año, es una luna nueva, es un pico energético con sorpresa en temas financieros y acuerdos económicos. Este momento nos empuja a usar el sentido común para evitar la pérdida de estabilidad.
Saturno se lanza directo y nos impulsa a asumir el control sobre el área de nuestra vida que aún se sostiene de forma irresponsable.
Este momento clímax es un final de ciclo energético para todos. Nos estamos preparando ya al nuevo ciclo que daremos inicio en este 2026. Año uno, año de inicios importantes.
Se trata de una instancia de profunda transformación de la energía, partida al otro plano, despertar a una nueva realidad, rupturas, crisis, etc.
Calma porque todo es perfecto.
Plutón transforma la energía y nada se puede resistir a esto. Donde tengas esta energía en tu carta está ocurriendo un final necesario.
Para quienes se preguntan, ¿será para bien?
La energía se puede regular. ¿Cómo?
Ampliando la consciencia, de modo que, a medida que más luz abres dentro de ti, más cómoda se siente la realidad.
Entonces dependiendo del estado de consciencia en el que nos encontremos los movimientos energéticos, se vivirán como un castigo o como una situación por la que hay que atravesar de la mejor forma posible.
No es solamente lo que nos pasa, sino cómo seamos capaces de asimilarlo.
El empeño por mejorar de forma interior ayuda a convivir con la realidad exterior de forma menos bélica.
Son momentos duros, pero no confusos, aprovechemos para ver todo lo horrible o bonito que se presenta para sentar nuevas bases en nuestras vidas.
Estamos en plena caída de estructuras que creíamos sólidas, para desanclar la dependencia con el exterior y así vivir con mayor control, autonomía y menor sufrimiento.
Uno de los síntomas más evidentes del despertar de la consciencia, es que tomas el control de tu vida.
La colocación de límites sanos es la expresión. El cierre de Plutón en Capricornio está apretando este territorio. Para abrirnos a un Plutón en Acuario.
Los límites, los innegociables, los basta, la responsabilidad, la autoridad, el control.
Son los conceptos que se están moviendo de forma profunda, abrupta y definitiva en este momento.
Estamos dejando atrás un paradigma de verticalidad, jerarquía y abuso, para pasar a escenarios mucho más fáciles para compartir y tomar poder desde la igualdad y horizontalidad. Este traslado energético no es lento, sino abrupto y radical.
La nueva energía acuariana que llega se enfrenta a la “autoridad” primero porque no la reconoce y segundo porque no la necesita porque gracias a Capri, siente que asumió el mando. Acuario, es la energía que vigila y vive desde la igualdad, la libertad y la unión desde la diferencia.
Las personas controladoras y que llevan mal la incertidumbre (este período revienta todo esto) probablemente lleven mal los primeros meses y años de la energía que arranca este mes con Plutón en Acuario.
La planificación y las metas aguantan, mientras estén abiertas al cambio y a la cooperación.
La energía que arranca el 19 de diciembre y se afianza con el solsticio del día 21, aunque radical, nos avisa del inicio de un proceso de dos décadas donde vamos a aprender sí o sí que la vida es cambio y cooperación desde la libertad. Empieza la época de la unidad y colaboración, es necesario encontrar nuestra “tribu”, la que nos acompañará en estos tiempos.
Nos volvemos a unir desde donde nos habíamos desconectado: desde el amor (la inteligencia máxima) algo que puede sonar muy lejano desde el viejo paradigma material que agoniza, pero necesario para la nueva realidad que empezaremos a caminar.
