El tipo de cambio cierra con ganancias tras decisión de política monetaria; la moneda mexicana acumula cuatro días al alza.
El llamado “súper peso” volvió a demostrar su resistencia en los mercados financieros, al cerrar la jornada de este jueves con una nueva ganancia frente al dólar estadounidense. El tipo de cambio se ubicó en 18.86 pesos por dólar, registrando una apreciación del 0.33 %, equivalente a 6.21 centavos, en comparación con su cierre anterior, según datos del Banco de México (Banxico).
Banxico recorta tasa y alivia presión financiera
El avance del peso se da en el contexto del recorte de 50 puntos base en la tasa de interés de referencia anunciado por Banxico, en un intento por estimular el consumo y la inversión, sin descuidar la estabilidad de precios.
“Esta reducción representa un alivio en los costos de financiamiento para hogares y empresas, pero también podría reducir el atractivo del peso como destino de inversión frente a monedas de países con tasas más altas”, explicó Felipe Mendoza, analista de mercados financieros de ATFX LATAM.
Influye especulación sobre cambios en la Reserva Federal
Aunado a lo anterior, la caída del dólar en los mercados internacionales también ha favorecido al peso. El debilitamiento de la divisa norteamericana se ha atribuido a los rumores de un posible cambio en la presidencia de la Reserva Federal (Fed), impulsado por la narrativa política en torno al posible regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Aunque aún no hay confirmación oficial, la expectativa ha generado movimientos relevantes en los mercados cambiarios.
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Índices del dólar registran retrocesos
El índice dólar (DXY), que mide la fortaleza de la moneda estadounidense frente a una canasta de seis divisas de economías desarrolladas, retrocedió 0.44 %, ubicándose en 97.24 puntos. De igual forma, el índice dólar Bloomberg (BBDXY) cayó 0.47 %, cerrando en 1,194.07 unidades.
Con estos movimientos, el peso mexicano continúa con una racha positiva de cuatro jornadas consecutivas, reflejo de un entorno financiero volátil pero favorable para los mercados emergentes, como el mexicano.
