Verstappen en el borde con Red Bull, sanción histórica y un mensaje de autocrítica
El Gran Premio de España no solo significó un duro golpe en lo deportivo para el piloto neerlandés, sino que también encendió las alarmas dentro de Red Bull por el riesgo de una sanción aún mayor.
Tras haber partido desde la tercera posición, por detrás de los McLaren de Oscar Piastri y Lando Norris, la carrera en el circuito de Montmeló se transformó en una pesadilla para el vigente campeón del mundo.
Una combinación de decisiones estratégicas cuestionables durante la aparición del Safety Car y un incidente con George Russell de Mercedes terminaron con Verstappen cruzando la meta en la décima posición, su peor resultado en los últimos ocho años.
La maniobra que protagonizó contra Russell fue evaluada por los comisarios, quienes determinaron una penalización de 10 segundos y la quita de tres puntos en su superlicencia.
Con ello, Verstappen acumula once puntos de penalidad en menos de un año, y queda a solo uno de recibir una suspensión automática por una carrera, según las normas establecidas por la FIA desde 2012.
Al ser consultado tras la carrera si el toque con el piloto británico fue deliberado, Verstappen respondió: “¿Eso importa? Creo que prefiero hablar de la carrera que de un solo momento. George debería haber recibido una sanción por eso, estaba claro”. Al enterarse de que Russell lo había criticado públicamente, el neerlandés retrucó: “Bueno, traeré...”, dejando la frase inconclusa, pero mostrando su evidente incomodidad con la situación.
Horas más tarde, y en un tono más reflexivo, el piloto compartió un mensaje en su cuenta de Instagram en el que asumió parte de la responsabilidad:
“Tuvimos una estrategia emocionante y una buena carrera en Barcelona, hasta que salió el coche de seguridad. Nuestra elección de neumáticos hasta el final y algunos movimientos después de la reanudación del coche de seguridad alimentaron mi frustración, lo que llevó a un movimiento que no era correcto y no debería haber sucedido. Siempre lo doy todo por el equipo y las emociones pueden estar a flor de piel. A veces ganamos juntos, a veces perdemos juntos. Nos vemos en Montreal”.
El dato que agrava aún más el contexto es que se trata del peor resultado de Verstappen como campeón vigente. No finalizaba tan abajo desde el Gran Premio de Italia en 2017, cuando cruzó la meta en décimo lugar tras largar 13º. Desde entonces, habían pasado 165 carreras sin que sumara apenas un punto.
Además, sus peores actuaciones más recientes habían sido dos novenos puestos: uno en Mónaco 2018 y otro en Hungría 2021. Desde 2023, ni siquiera había caído fuera de los seis primeros puestos.
De cara al próximo compromiso del calendario, el Gran Premio de Canadá (13 al 15 de junio), Verstappen deberá evitar cualquier acción sancionable, pues otro incidente podría costarle su participación en una carrera, justo en medio de la defensa por su quinto título mundial. De no incurrir en nuevas penalizaciones, podría recuperar margen a partir del 30 de junio, cuando expirarán dos puntos aplicados por una colisión con Lando Norris en Austria 2024.
Mientras tanto, el entorno de Red Bull observa con atención cómo su piloto estrella lidia con la presión, las críticas y las consecuencias de una conducta que, por primera vez en años, pone en duda su continuidad ininterrumpida en la pista.
