
Dulzura celeste al estilo Sanrio: una receta inspirada en el tierno perrito alado.
Si eres fan de Cinnamoroll y de los postres delicados, esta receta es para ti. Te traemos unos macarons azules con carita de Cinnamoroll, rellenos de una suave crema de vainilla y malvavisco, perfectos para una tarde kawaii con amigos o como regalito especial.

Ingredientes:
Para los macarons:
- 100 g de harina de almendra
- 100 g de azúcar glass
- 75 g de claras de huevo (a temperatura ambiente)
- 100 g de azúcar granulada
- Colorante vegetal azul (en gel)
- Un toque de colorante blanco (opcional)
Para el relleno de vainilla y malvavisco:
- 100 g de malvaviscos blancos
- 2 cdas de leche
- 100 g de mantequilla sin sal
- 1 cdita de extracto de vainilla
Preparación:
- Macarons: Tamiza la harina de almendra y el azúcar glass. Bate las claras hasta formar picos suaves, agrega poco a poco el azúcar granulada hasta formar un merengue firme. Añade el colorante azul y mezcla en forma envolvente con los polvos tamizados hasta lograr una mezcla homogénea y brillante. Forma círculos sobre una bandeja con papel encerado. Deja secar 30-40 minutos antes de hornear a 150°C por 12-15 minutos.
- Relleno: Derrite los malvaviscos con la leche en el microondas o a baño María. Deja enfriar un poco y bate junto con la mantequilla y la vainilla hasta obtener una crema esponjosa.
- Arma y decora: Une las tapas de los macarons con el relleno. Puedes dibujar la carita de Cinnamoroll con colorantes comestibles o pluma de tinta alimentaria. Si deseas un toque extra, añade orejitas de fondant o chocolate blanco.
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¿Quién es Cinnamoroll?
Cinnamoroll es un tierno perrito blanco creado por Sanrio en 2001. Tiene orejas largas que le permiten volar, mejillas rosadas, una cola en forma de rollito de canela y una personalidad dulce y soñadora. Vive en el cielo y suele descansar sobre nubes esponjosas, pero también trabaja en una cafetería llamada Café Cinnamon, donde alegra a todos con su ternura. Es uno de los personajes más adorados de Sanrio, ideal para inspirar recetas suaves, celestiales y llenas de cariño.