
En el sur de México, se encuentra un rincón casi virgen que está esperando ser descubierto: los Manantiales Pedro Baranda, ubicados en el municipio de Candelaria, Campeche. Este destino es uno de los secretos mejor guardados de la región, ofreciendo un espectáculo natural que rivaliza con la famosa Laguna de los Siete Colores de Bacalar. Aquí, las aguas cristalinas no solo cautivan por su belleza, sino por el fascinante juego de tonos que van desde azules intensos hasta verdes vibrantes.
El colorido de los Manantiales Pedro Baranda es el resultado de las plantas marinas que habitan en sus profundidades. Estas especies subacuáticas le otorgan una paleta de colores única, que varía según la luz y la profundidad del agua, creando un paisaje que parece sacado de un sueño. Para disfrutar de esta maravilla de la naturaleza, lo mejor es hacerlo acompañado de un guía local, quien te llevará a recorrer los rincones más impresionantes de este paraíso escondido.
El sitio es ideal para los amantes de la biodiversidad. Además de su impresionante juego de colores, el lugar alberga una amplia variedad de flora y fauna marina, lo que lo convierte en un punto atractivo para los ecoturistas. Sin embargo, lo que realmente hace especial a los Manantiales Pedro Baranda es su condición semi-virgen: pocos turistas han descubierto este rincón de Campeche, lo que lo convierte en un destino tranquilo y exclusivo para aquellos que buscan escapar del bullicio de los destinos más turísticos.
Crea momentos memorables en las impresionantes aguas azul turquesa de Candelaria. 🌿🏞️
— SECTUR México (@SECTUR_mx) February 5, 2025
Un santuario ecoturístico que te sorprenderá, ideal para deportes acuáticos como el rafting o esnorquel. Admira los impresionantes manantiales Pedro Baranda, de aguas azul turquesa tan… pic.twitter.com/aLabjb1Ny0
Si decides visitar este lugar, es importante que llegues temprano para aprovechar al máximo tu día. Las actividades como el esnórquel te permitirán explorar los fondos marinos y sumergirte en los vibrantes colores de sus aguas. Eso sí, al ser un lugar sin grandes instalaciones turísticas, no hay servicios de comida, así que recuerda llevar tu propio snack y bebida para disfrutar mientras exploras.