¿Qué hacer y qué NO si tienes dengue? Consejos para el manejo adecuado de la enfermedad

El dengue, una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti, continúa siendo una preocupación de salud pública. A medida que los casos de dengue aumentan en la entidad, es vital que las personas sepan cómo manejar esta enfermedad adecuadamente para evitar complicaciones graves.
Síntomas principales:
Los síntomas del dengue suelen aparecer entre cuatro y diez días después de la picadura del mosquito infectado. Entre los síntomas más comunes se encuentran fiebre alta, dolor detrás de los ojos, dolor muscular y articular, fatiga, náuseas, vómitos y erupciones en la piel. Sin embargo, el dengue puede progresar a formas más graves, como el dengue hemorrágico, que puede ser mortal si no se maneja de manera correcta.
Qué hacer si tienes dengue:
- Descanso absoluto: Uno de los primeros pasos para manejar el dengue es descansar. El cuerpo necesita tiempo para combatir la infección, y cualquier esfuerzo físico puede agotar las energías necesarias para la recuperación.
- Hidratación constante: Mantenerse bien hidratado es crucial, ya que la fiebre y la sudoración excesiva pueden provocar deshidratación. Se recomienda beber líquidos constantemente, incluyendo agua, suero oral, y jugos naturales. Los electrolitos también son esenciales para reponer las sales y minerales que el cuerpo pierde.
- Uso de paracetamol: Para controlar la fiebre y el dolor, los expertos sugieren el uso de paracetamol. Este medicamento es seguro para los pacientes con dengue y ayuda a aliviar los síntomas sin causar complicaciones.
Qué no hacer si tienes dengue:
- Evitar el uso de ibuprofeno y aspirina: A diferencia del paracetamol, medicamentos como el ibuprofeno, la aspirina y otros antiinflamatorios no esteroides (AINEs) están contraindicados en pacientes con dengue. Estos medicamentos pueden aumentar el riesgo de sangrado, especialmente en los casos graves de dengue hemorrágico.
- No automedicarse: Automedicarse puede ser peligroso. Es importante seguir las indicaciones de un profesional de la salud y evitar cualquier medicamento o tratamiento no recomendado por el médico.
- No subestimar los síntomas: Aunque algunos casos de dengue pueden ser leves, es vital no subestimar los síntomas. Si la fiebre persiste o se presentan señales de alarma como dolor abdominal intenso, vómitos persistentes, dificultad para respirar, o sangrado, es fundamental buscar atención médica de inmediato.
Manejo del dengue :
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el manejo del dengue se centra en tratar los síntomas y evitar complicaciones graves. Si bien no existe un tratamiento antiviral específico para el dengue, el control de los síntomas es clave para prevenir que la enfermedad progrese a formas más graves.
Prevención del dengue:
La prevención sigue siendo la mejor forma de combatir el dengue. Eliminar los criaderos de mosquitos, usar repelente de insectos y colocar mosquiteros en puertas y ventanas son algunas de las medidas más efectivas para reducir el riesgo de infección.
El dengue es una enfermedad que debe manejarse con cuidado y responsabilidad. Con un tratamiento adecuado y la atención médica oportuna, es posible evitar complicaciones graves y mejorar la recuperación.