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Conoce las 10 mejores cascadas de México

México es un país lleno de maravillas naturales, y entre sus joyas más espectaculares se encuentran sus cascadas. Desde la exuberante vegetación de Chiapas hasta los paisajes majestuosos de Oaxaca y San Luis Potosí, estas caídas de agua ofrecen experiencias inolvidables. Aquí te presentamos una selección de las diez mejores cascadas en México que no te puedes perder.

1. Cascadas de Agua Azul, Chiapas

Ubicadas a 130 kilómetros de San Cristóbal de las Casas, las Cascadas de Agua Azul son un espectáculo natural que combina el azul turquesa de sus aguas con el verde de la selva. Estas cascadas escalonadas permiten nadar en sus tranquilas albercas naturales o disfrutar de actividades más adrenalínicas como el rafting. El verano es la mejor época para visitarlas y ver el agua en su tonalidad más azul.

2. Cascada Misol-Ha, Chiapas

A solo 20 kilómetros de Palenque, la cascada Misol-Ha se alza con una impresionante caída de más de 30 metros. Este paraje ha sido escenario de películas y ofrece la oportunidad de nadar en sus aguas o explorar una gruta detrás de la cascada, donde se realizan ceremonias mayas. El camino al mirador proporciona una vista espectacular de este impresionante salto de agua.

3. El Chiflón, Chiapas

Este parque ecoturístico cerca de Comitán cuenta con una serie de cascadas que suman casi 120 metros de altura, incluyendo la famosa Velo de Novia. Con albercas naturales de color azul turquesa y diversos senderos para explorar, El Chiflón es ideal para una experiencia completa en la naturaleza, con opciones de alojamiento y actividades como tirolesa.

4. Cascadas de Agua Blanca, Tabasco

Situadas en el Parque Estatal Agua Blanca, estas cascadas en el municipio de Macuspana son perfectas para un baño refrescante en sus pozas formadas por la caída del agua. El parque cuenta con facilidades como estacionamientos y restaurantes, además de la impresionante Gruta de Ixtac-Ha, un atractivo adicional para los visitantes.

5. Hierve el Agua, Oaxaca

A 70 kilómetros de la ciudad de Oaxaca, Hierve el Agua no es una cascada tradicional, sino una formación rocosa petrificada con un alto contenido de carbonato de calcio. Sus pozas naturales de diferentes colores y el espectacular paisaje de la Sierra Mixe la convierten en un destino único. Se dice que sus aguas tienen propiedades curativas.

6. Cascada Tamul, San Luis Potosí

Con una caída de 105 metros, Tamul es la cascada más grande de la Huasteca Potosina. Llegar hasta ella implica remar a contracorriente por el río Tampaón, lo que añade un toque de aventura. Desde el mirador en el ejido El Naranjito, se puede admirar esta maravilla natural desde lo alto, complementando la experiencia.

7. Cascada Minas Viejas, San Luis Potosí

Menos conocida pero igualmente impresionante, la Cascada Minas Viejas se encuentra en la selva potosina. Con varias pozas de color azul turquesa y la posibilidad de acampar cerca, es un destino ideal para los amantes de la naturaleza. La cercanía con la Laguna de Patos ofrece una oportunidad adicional para pescar.

8. Cascada Piedra Volada, Chihuahua

Ubicada en el Parque Nacional Basaseachi, la Cascada Piedra Volada es la más alta de México con una caída de 453 metros, visible solo durante la temporada de lluvias. Este paraje en la Sierra de Tarahumara es ideal para la escalada y el rappel, con impresionantes vistas panorámicas de la barranca.

9. Cascada Basaseachi, Chihuahua

También en el Parque Nacional Basaseachi, esta cascada tiene una caída permanente de 246 metros. Rodeada de un paisaje impresionante y rica en flora y fauna, es un destino ideal para largas caminatas y actividades al aire libre. La leyenda de la princesa Basaseachi añade un toque místico a su visita.

10. Cascada Cola de Caballo, Nuevo León

A 45 kilómetros de Monterrey, cerca del Pueblo Mágico Villa de Santiago, la Cascada Cola de Caballo tiene una caída de 25 metros que asemeja una cola de caballo. Con exuberante vegetación y opciones para el turismo de aventura como tirolesa y bungee, este destino es perfecto para una escapada natural.

México ofrece una diversidad impresionante de cascadas que cautivan por su belleza y la experiencia única que proporcionan. Desde nadar en pozas turquesas hasta explorar grutas y realizar actividades de aventura, estas cascadas son un tesoro natural que vale la pena descubrir.

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